Los grandes olvidados, de la dictadura judicial, son las víctimas crucificadas, olvidadas, por las hordas justicieras. Una parte de los beneficios de mi libro: El Secuestro de Olot (2€ por ejemplar) servirá para reparar y evitar que, los chivos expiatorios, seamos carne de cañón prescindible y enterrada..
Después de hablar con cientos de personas, que han sufrido una injusticia grande o pequeña, los afectados se cuentan por miles. Quiero compartir, con vosotros, vuestras historias personales para que os desagüéis la pena incrustada en vuestros corazones para toda la vida.
Vivimos en un mundo globalizado y, sin embargo, cada día estamos más solos. Los poderes fácticos lo han conseguido: fragmentarnos en pequeñas islas de soledad.
Os brindo la posibilidad, mediante este blog, de vomitar vuestra pena y así... superarla.Si somos capaces de unirnos: seremos invencibles.
Adelante, vamos a por ellos.
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