La verdad, en el mundo judicial, importa una mierda

La ignorancia del pueblo... es la cosecha del poder.

Es triste reconocerlo pero a la mayoría, de los ciudadanos, no les interesa saber la verdad. Y los poderes fácticos campan a sus anchas en la política del expolio, que padecemos los ciudadanos.
!Viva la corrupción!
El nivel cultural del pueblo es... deprimente.
Y ahí es donde se basan para vivir como reyes, los déspotas.
En nuestra sociedad, actual, los trabajadores estamos abocados a la miseria y a pasar penurias porque los que mandan, de verdad, los que tienen el poder, no tienen oposición alguna. Van a desmontar, en pocos meses, la paupérrima sociedad del bienestar. La gente no lee, la gente no quiere saber como actúan, realmente, los políticos, jueces, fiscales, policías... No interesa a casi nadie.
Mi historia, mi secuestro dentro del secuestro de Olot, es una pequeña muestra, insignificante, de las burradas, chapuzas, e incluso los delitos, que cometieron cuando me crucificaron vivo en la farsa del proceso, que hubo en mi contra dentro los prolegómenos del secuestro de Olot.
Ahora que existe la oportunidad de conocer, saber, porque he escrito un libro explicando la verdad: El Secuestro de Olot, pero... no hay gran interés en averiguar la verdad.
Han pasado 20 años y a, ¿quien? Le importa una injusticia más, entre millones de injusticias.
El tiempo y el olvido son los mejores aliados de los tribunales.
Los que mandan piensan que los ciudadanos somos gilipollas... Y quizás tienen razón.
En fin. Que se vaya al mierda el 2012, y bienvenido sea el 2013.
Felices Fiestas.
Y si alguien quiere saber... ahora tiene la oportunidad: www.elsecuestrodeolot.com